Supongamos que estamos en un supermercado, donde todos los productos están etiquetados con etiquetas RFID (cambiamos los códigos de barras por RFID).
Cargamos el carro igual que hacemos siempre, pero, a medida que vamos introduciendo productos en el carro, éste prodría indicarnos en una pantalla, el importe total
de los productos que vamos poniendo en el carrito.
Al ir a pagar, NO haría falta descargar el carro y que una cajera pasara uno por uno los productos por un lector de barras, NO haría falta solicitar un precio, porque el
código de barras está roto o mal impreso, simplemente pasaríamos por un arco y éste emitiría la correspondiente factura, que podría ser pagada sin sacar la cartera del
bolsillo si nuestra targeta de crédito llevara incorporado un sistema RFID.
Este caso no es un ejemplo hipotético, se está implantando en una cadena de supermercados en Estados Unidos